DATOS DE LA RUTA
HORA DE SALIDA: 09:01
HORA DE LLEGADA: 12:12
TIEMPO DE PEDALEO: 02:41
TIEMPO TOTAL EMPLEADO: 03:11
DISTANCIA RECORRIDA: 31.0 Kms.
TEMPERATURA MEDIA: 5.8 ºC ( mín.: 3.0 ºC máx.: 12.0 ºC ).
SENTIDO DE REALIZACIÓN: habitual
OBSERVACIONES: Viento fuerte desagradable en la subida a Bustarviejo. Hubo un grupo que fueron a investigar un sendero por el bosque de Bustarviejo. varias caídas sin importancia.
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ASISTENTES: (20)
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caídas en la ruta: (8)
pinchazos en la ruta: (0)
averías en la ruta: (0)
"Lo bueno si breve…” (y no es la crónica)
El domingo, cuando me puse a reconstruir los acontecimientos de la etapa con la intención de ser fiel a mi afirmación: "cuanto antes hagas la crónica menos esfuerzo te cuesta...", la pereza me llevó a curiosear en nuestra preciada y profusa web ciclista y llegué a la conclusión que nos falta un dato en las estadísticas, a saber: Clasificación de los ciclistas en función de las crónicas realizadas ponderando la asistencia, por lo que pude deducir, sin hacer muchas cuentas, que no compensa, siendo principal, dilatar la asistencia a las rutas, al final, cuando vas te toca sufrir en la bici y, con el culo resentido, en la silla frente al ordenador.
Después de está sentida reflexión, daremos paso a la crónica propiamente dicha. La etapa se realizó relativamente cerca, entorno al Cerro del Pendón, por los términos municipales de Guadalix y Bustarviejo, la distancia moderada, 31 kilómetros con un desnivel de 630 metros, por lo que la dificultad y por ende, el sufrimiento se suponían bajos. No obstante, el viento que fue de menos a más, incremento esta y nos hizo agachar la cabeza y meter riñón para superar algunos tramos especialmente expuestos. Luego las delicias del recorrido y las sendas elegidas nos hicieron olvidarnos del viento y poner los cinco sentidos en realizar el trazado correcto y en disfrutar al máximo de una fantástica ruta de MTB.
Veintiún ciclista se personaron en Guadalix de la Sierra, con alguna baja de última hora por causas intestinales (cuentan las malas lenguas que el café a Juanma le jugó una mala pasada) y con una nueva incorporación, Vishal (bienvenido al club, espero que disfrutaras de la ruta y que repitas cuando quieras). El resto caras más o menos frecuentes, aunque con algunas ausencias significativas de varios asiduos (Juan, Javi Ignacio, David... ¡Feliz año!, y a recuperarse, nos vemos pronto), saludos, felicitaciones, chascarrillos varios y algunos, a los que les sobra el tiempo, poniendo "piedrecitas de mechero" en los maleteros de los asistentes... si es que ya lo ha dicho alguno en alguna otra crónica (entrecomillo para que no me acusen de plagio) "hay más cabrones que pinos".
La ruta tenía una gráfica fácil de recordar, aunque para ello habría que haberla mirado, pero que en resumen era subir, subir, subir, hasta arriba, y luego bajar, bajar, bajar, hasta abajo. A pesar de esto, unos cuantos, antes de llegar arriba, haciendo oídos sordos a los pitidos de sus GPS, liderados por Rafita y llevados en volandas por la inercia de una senda muy divertida quisimos bajar hasta abajo y, en consecuencia, nos tocó subir hasta arriba y pegarnos un pateo empujando las monturas por una pendiente de no sé que porcentaje, pero mucho.
Del comienzo poco que decir, temperatura agradable, baja, pero llevadera, creo recordad que a primera hora incluso solecito, y poco más, Ricardo, a la cola, intentando conectar con el grupo, otros de charleta y el cronista añorando aquellos tiempos en los que podía decir: "voy hacia delante a ver que se cuece por ahí...", hasta la primera parada de reagrupamiento no vi nada..., en ese momento intenté salir con la cabeza del grupo para recoger información y plasmarla aquí, haciendo esta crónica un poco más ecléctica, pero vamos que duré na y menos y encima nos pasamos el desvío.
Transitando por el Camino Alto de las Viñas y a pesar de los avisos tecnológicos unos cuantos ciclistas seguimos el sendero de bajada hacia Los Navazales, lo que nos supuso un pateada monte a través hasta conectar con la pista del track. Una vez allí comienza la lucha contra el fuerte viento que se fue levantando. Se tiró de trabajo en equipo y buscando refugio detrás de la rueda de algún compi pasamos el trago lo mejor que pudimos. En Bustarviejo nueva parada para esperar a los despistados, reagruparnos y reponer fuerzas.
En este punto de la ruta el grupo se vuelve a segmentar, ahora bien, esta vez, voluntariamente. Siete intrépidos o inconscientes bikers, según el poliedro con el que se mire (para los curiosos: https://es.wikipedia.org/wiki/Poliedro), se aventuran a seguir la estela marcada por Juanjo, ciclista amante de las trialeras, de hecho, para mí, verle al llegar al punto de comienzo de la ruta es señal de que el track promete ser especialmente divertido. La variante por el sendero del bosque de Bustarviejo no decepcionó a nadie. Aunque presentó algún tramo de cierta dificultad es ciclable en su mayor parte y resulta muy divertida. Por los comentarios que me han llegado, el trazado marcado no tiene nada que envidiarle, pues discurre por un sendero muy chulo, paralelo a la pista del GR que formó parte del diseño original de la ruta.
La última parte del recorrido es común a todo el grupo, aunque por separado, todos disfrutamos de un suave descenso por un camino estrecho y con mucha piedra, lo que obliga a mantener la atención y agudizar los sentidos para, con el manillar firmemente sujeto, elegir la trazada correcta y no desbarrancar. Por cierto, me costa que hubo varias caídas, todas sin consecuencias, algunos no pudieron evitar el ojo avizor del cronista. De hecho me he permitido corregir los datos de la ruta para sumarle una segunda caída a nuestro líder en esta categoría… (espero que este año el club tenga un detallito contigo y te regalen al menos unas tiritas…).
Una vez con las bicis cargadas en los coches y animados por lo temprano de la hora y el agradable sol que nos calentaba la mayoría de los presentes nos fuimos a la terracita del bar de la plaza para reponer líquidos, deleitarnos con viandas varias, intercambiar impresiones y brindar por los domingos de bici, las cositas de montar y por nuestro compi Alejandro Benito, por cierto, lo de este chaval da para una nueva crónica… espero no tener que escribirla yo… ¡¡¡Felicidades y enhorabuena a los premiados!!!
Nos vemos más pronto que tarde, un verdadero placer recorrer los paisajes madrileños (es un decir…) con ustedes.
(escrito por Carlos Terán)
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