DATOS DE LA RUTA
HORA DE SALIDA: 08:30
HORA DE LLEGADA: 12:30
TIEMPO DE PEDALEO: 03:32
TIEMPO TOTAL EMPLEADO: 04:0
DISTANCIA RECORRIDA: 49.3 Kms.
TEMPERATURA MEDIA: 21.0 ºC ( mín.: 15.0 ºC máx.: 28.0 ºC ).
SENTIDO DE REALIZACIÓN: habitual
OBSERVACIONES: Rutón, éste sí. Avería de Ángel por rotura de cadena en los primeros senderos, solucionado rápidamente. Caída de Juan sin consecuencias.
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ASISTENTES: (14)
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caídas en la ruta: (1)
pinchazos en la ruta: (0)
averías en la ruta: (1)
EN MEMORIA DE ENRIQUE (CAPOTE)
Domingo, día habitual de montar en bici, no suena el despertador, porque siempre estoy despierto antes, ha sido una semana estresante, algún hijo de las cuatro letras se dedicó a piratear mi línea de móvil, con el consiguiente destrozo, no se lo deseo ni a mi peor enemigo, me bloquearon en WhatsApp, y tuve que ir a denunciar, al final número nuevo, movil nuevo, y no sé si algún día recuperare todas mis aplicaciones y cuentas, porque al poner que has olvidado la contraseña, al lógico cuando pones tantas, y además tienes una edad, te dicen que te envían un SMS, justo al número de movil que ya no tienes, es una locura
Cargo la bici en el coche, y a la puerta del banco para esperar a los otres ciclistas que salimos del CdC. Adolfo llega tarde, como siempre, y esta vez no le puede echar la culpa a Victor, porque viene con Fredy, así que salimos a toda leche, esta vez no era consciente de que yo era el cronista, no había podido ni mirarlo en la web, me entere en casa después de terminar la ruta.
A la llegada a Torres de la Alameda, éramos 14 ciclistas, 13 apuntados, más Gonzalo, una nueva incorporación que hace su segunda ruta con nosotros. Saludos, besos, abrazos y al lío, hace buena temperatura para pedalear, 16º C según mi Garmin.
Salimos rumbo a Campo Real, nada más empezar en un campo de olivos, avería en la bici de Angel, se rompe el cierre rápido de la cadena, David y un servidor solucionamos la incidencia como si de mecánicos de fórmula 1 se tratara.
Subimos por un sendero estrecho, esta vez según me dice David, diseñador de la ruta Victor ha cambiado el sendero, antes subíamos por la derecha, y ahora por la izquierda, será cosa del gobierno, del MTB por supuesto.
Una vez llegamos arriba toca divertimento, sendero de bajada que recuerda a los del parque natural de Alcalá de Henares. Por este tipo de senderos merece la pena el sufrimiento de las subidas.
Llegamos a Campo Real, parada de rigor en el cementerio, como en todas las rutas, debe ser que como ya tenemos una edad hay que ir visitando distintos sitios para nuestra próxima morada. Alguno propone comprar aceitunas, pero cuando les dices que las tienen que llevar a los coches, desisten.
En un parque hacemos una parada para comer, cada uno se come su plátano, o su barrita, lo que haya traído, si bien vi alguno que se comió medio plátano de otro
Salimos a la carretera y llegamos a Arganda, pasamos por el museo del tren, y vimos un tren que pitó, y ya sé porque el tren de Arganda pita más que anda.
Seguimos en dirección a la laguna del Campillo, foto de grupo en la laguna que amablemente nos hace un señor que estaba con su hijo en un triciclo, y como no le vacilaron, somos así con la gente que quiere colaborar.
Cuando llegamos al final de la laguna, cruzamos el puente del tren que lo han arreglado, y ahora se puede pasar montado en la bici, es de agradecer.
Cuando llegamos a las lagunas de Velilla, el grupo se divide en dos, cuatro que tenemos prisa, y no hacemos las lagunas, son 10 minutos, pero toda cuenta, y los otros diez que si las hacen.
A partir de aquí bien la peor parte de la ruta, de senderos divertidos pasamos a una pista sube y baja, David y yo lo llevamos bien, nuestros acompañantes no tanto, cuando llegan a los coches después de haberles esperado varias veces, ya teníamos las bicis en los portabicis y nos íbamos, ya llegaban también las primeras unidades de los otros 10.
Lamento no haberme quedado a lo que más me gusta de las rutas, que son las cervezas, pero es lo que hay.
Por la tarde, me entero de que ha fallecido un amigo, Enrique, Capote, un compañero ciclista del grupo del pueblo, un chaval joven, 42 años, deportista de siempre, con el que las rutas eran divertidas, buscaba nuevos senderos y caminos, aunque acabáramos en un sembrado sin salida, que injusta es esta vida. Quiero dedicarle esta crónica, descanse en paz.
Por los que están y por los que no están, siempre brindaremos “por las cosas de montar”. Un abrazo.
(escrito por Goyo)
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