Por fin llegó la tan esperada ruta por Las Navas del Marqués que pretendía hermanar a los dos grupos de ciclistas, los del Club de Campo-Ciudalcampo y los de Las Navas. La respuesta de los naveros a nuestra visita fue multitudinaria, vinieron más de 16 ciclistas, la pena es que de nosotros sólo fuimos 4 (espero que en la próxima vayamos más gente). El recorrido, que yo mismo había diseñado para que se pasara por todos los paisajes típicos de este pueblo abulense, se hizo al final para algunos un poco duro, pero creo que los que la realizamos pudimos disfrutar de unos paisajes únicos. En la primera subida, destacar que José Luis se enganchó con el más jóven del grupo, un chavalín que compite en mountain bike, y rompió su bici. ¡Dobló la patilla del eje trasero! que es parte del cuadro, ¡qué bestia! La pena es que, aunque intentó aguantar, al final tuvo que abandonar cuando quedaba el 80% del recorrido y que estoy convencido de que hubiera disfrutado más que nadie, ¡una pena! También hubo en el mismo punto otros dos abandonos por pinchazo y no tener repuesto, padre e hijo tuvieron que abandonar. El resto de los ciclistas (17) conseguimos terminar el recorrido, aunque tuvimos que acortarlo (quitando la subida final al risco) por cansancio y porque era ya muy tarde (hubo muchas paradas y otro pinchazo). Al final acabamos en el bar Flappys bebiendo cervezas y degustando el "famoso" pote navero (patatas revolconas). Lo de la ducha, mejor no comentarlo mucho, porque cuando acudimos al polideportivo, media hora tarde, estaba cerrado, pero ¡vaya si nos duchamos! y no voy a decir dónde. Personalmente quiero dar las gracias en nombre de "los ciclistas madrileños" a la gente de Las Navas por su hospitalidad recordándoles que nos deben devolver la visita este otoño, ¡gracias! y ya nos veremos en Madrid. (by Víctor) (escrito por Víctor) |
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pinchazos en la ruta: (0)
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